YInMn | Químicos descubren pigmento azul que ayudaría a enfriar la temperatura de los edificios.

Este pigmento llamado YInMn Blue o MasBlue, está formado por una estructura cristalina que permite a los iones de manganeso absorber la luz rojo y verde, reflejando únicamente la luz azul. Esta estructura ya era conocida, nunca había sido utilizado para propósitos comerciales, ni siquiera en pigmentos.

Usado en pinturas, el pigmento es altamente versátil, especialmente si refleja luz infrarroja a una taza superior al 40%, ayudando entonces a mantener fríos los edificios. Asimismo YInMn Blue puede ser utilizado en revestimientos, plásticos y hasta en techumbres. Ninguno de los ingredientes del pigmento es tóxico, volviéndolo especialmente innovador para su uso en pinturas. Con una estabilidad y durabilidad constante incluso cuando se expone al agua o al óleo, el pigmento mantiene su tono por mucho tiempo.

En marzo de 2012, el equipo de Subramanian patentó el pigmento ante las respectivas instituciones acreditadoras en Estados Unidos, y desde ahí ha estado trabajando con la compañía Shepherd Color Co. para comercializar la tinta.

El equipo está investigando también otros modos para desarrollar pigmentos de otros colores con similares propiedades.

Nuevas tecnologías

Breathing Skins de Tobias Becker |

Deja que tu edificio respire con esta nueva tecnología neumática para fachadas.

El proyecto Breathing Skins de Tobias Becker está basado en el concepto de la biomimética, inspirada en pieles orgánicas que ajustan su permeabilidad para controlar el ingreso de la luz, materia y regular la temperatura entre el interior y el exterior. El constante cambio en la apariencia de la fachada crea una interesante interacción entre el medio natural exterior y espacios interiores.

Las fachadas funcionan mediante el cambio en tamaño de las aberturas que se encuentran dispersas por toda la superficie, al igual que los poros de la piel, se abren o contraen. En cada metro cuadrado de esta fachada interactiva, hay 140 canales de aire llamados "músculos neumáticos". Estos aparatos circulares se inflan y desinflan para controlar la permeabilidad de la fachada. Como una arquitectura reactiva, los músculos neumáticos -siempre cambiantes- permiten una cantidad específica de aire, luz y la visibilidad de acuerdo a la preferencia de los usuarios.

La tecnología consiste principalmente de dos superficies de vidrio que intercalan los músculos neumáticos. En la zona entre los dos paneles de vidrio, se requiere sólo una ligera presión negativa a la apertura de cada músculo, solo se requiere una energía mínima.

El proyecto de Becker ahora se exhibe en una sala de exposiciones en Mandelbachtal, Alemania, construida en colaboración con Simon Huffer. La forma real de los paneles de vidrio parece ser ilimitada, con la misma apariencia de cualquier superficie plana o de curvas sinuosas, mientras que la coloración de los "músculos neumáticos" puede ser translúcida u opaca, demostrando la personalización del producto.